Las grandes pandemias habían estado tan espaciadas que las nuevas generaciones no lo considerábamos un problema. Hoy en día debemos revisar la historia para ver que esto ha sido parte de nuestra vida, he incluso ha puesto en predicamentos a la especie humana en ocasiones anteriores. El riesgo que vivimos hoy, es que estas pandemias sucedan cada vez más frecuentemente y que deterioren nuestra calidad de vida a nivele peligrosos.
En ese sentido, creo que debemos cambiar paulatinamente, pero de forma acelerada. Por lo pronto, regresar a la nueva normalidad lo antes posible, activando la economía con los negocios y el modelo económico vigente, pero de inmediato iniciar con un proceso de educación y modificación de hábitos que impacten a las nuevas generaciones, quienes serán las responsables de vivir en armonía con el planeta por más tiempo.
Los cambios principales pueden ser:
- Estirar las modas. El planeta no es capaz de soportar 3-4 cambios de moda por año. La moda genera mucha producción de cosas diferentes y poco duraderas, que el consumidor usa poco tiempo y desecha, genera mucha basura innecesaria.
- Reutilizar más. La basura se vuelve basura cuando la sacamos a la calle en una bolsa. Antes, es un material re-utilizable muchas veces con tecnología suficiente para ser muy útil nuevamente. Cartón, botellas PET, empaques, envolturas, etc., son cosas que pueden perdurar en nuestras casas teniendo un uso práctico. Además, eso reduce contaminación al disminuir la cantidad de basura.
- Reciclaje cercano. Necesitamos tener centros de reciclaje en las colonias, para lograr que algo que es útil pero que no utilizamos nosotros, se convierta en una cosa nueva en un ciclo muy corto. Por ejemplo, poner mini-trituradoras de PET en los oxxos y que eso luego se convierta el hilos de plástico para hacer nuevos productos y como esa muchas mini-recicladoras más. Evitando que esos productos lleguen al tiradero municipal, se reduce la contaminación por basura y por procesamiento.
- Fabricación de productos modulares y duraderos. Regresar a la época donde un producto era más caro, pero te duraban muchos años, esto esta ligado al estiramiento de las modas. La diferencia a los productos de antaño es que los nuevos tengan módulos actualizables para adquirir las innovaciones en solo algunas partes del producto y no tener que desecharlo todo.
- Economía circular. Que las nuevas empresas tengan un diseño que respete el ciclo de las materias primas, generando la menor cantidad de desperdicio posible, esto incluso debería estar regulado para que sea obligatorio.
- Regeneración de recursos renovables. Todo producto debe comprobar en su etiqueta, que ha regenerado el entorno natural de donde extrajo las materias primas.
- Uso de componente amigables con el ambiente. Que los insumos para producir algo no contaminen el hábitat. Por ejemplo: fertilizantes, herbicidas, desechos industriales, etc. Que se utilicen las nuevas tecnologías para disminuir esos impactos negativos desde la producción.
- Incremento de soluciones basadas en impresión 3D. Si logramos tener productos impresos en 3D en la misma colonia, podemos tener control del diseño personalizado y un producto impreso que queramos desechar, puede ser reutilizado en la misma empresa de impresión 3D, sin convertirse en basura.
- Más trabajo virtual. Mientras más tiempo pasemos en nuestro hogar, menos contaminación por tráfico habrá, con mejoras en la salud, teniendo más tiempo efectivo, etc. Un modelo mixto de actividades presenciales-virtuales, puede tener un gran impacto en el planeta.
- Huertos urbanos. Producir nuestra comida en el jardín de la casa o en huertos comunitarios, generará una mejor utilización de los espacios abandonados o sub-utilizados dentro de la misma ciudad, haciendo menos necesario afectar el ecosistema natural y reduciendo costos de producción y transporte.
¿Qué otra idea podemos agregar aquí?
Estas ideas, DEBEN ser parte de la cultura de nuestros niños, HOY, para que crezcan y sean los emprendedores del futuro que pensarán en crear negocios basados en el respeto del medio ambiente.
“La llave a nuestra salud futura son nuestros niños”