Vivimos en una época dominada por la tecnología, nos es imposible salir de casa sin nuestro celular, tenemos la sensación de que algo nos falta si nos desconectamos aunque sea un ratito, incluso en nuestro propio hogar va “anexado” en nuestras manos a todos lados. Algunas fuentes señalan que miramos el móvil más de 80 veces al día.
Nos ha dejado de interesar literalmente lo que sucede a nuestro alrededor, los usuarios están revisando sus redes sociales frecuentemente, nos estamos convirtiendo en robot digitales. ¿Acaso nos hemos vuelto incapaces de sostener una conversación cara a cara? En promedio cada 6 minutos revisamos nuestro teléfono, se estima que actualmente mandamos como mínimo 110 mensajes de textos diariamente. En The World Unplugged Project, investigadores de la Universidad de Maryland informaron que “una mayoría evidente” de estudiantes en los 10 países estudiados experimentaron angustia cuando intentaron estar sin sus dispositivos durante 24 horas.
Toda nuestra vida se ve afectada por este pequeño aparato, ¿prendes tu teléfono al despertar todos los días?, ¿cuántas selfies te tomas al día?, ¿ya le avisaste al mundo que estás en el gimnasio, de vacaciones en la playa o comiendo un suculento platillo de salmón?, ¿cuánto tiempo le permites usar a tus hijos tu celular?, ¿cuándo fue la última vez que platicaste con tus amigos?, ¿cuánto tiempo pasas con tu pareja?, etcétera …
Es cierto que hay factores que afectan las relaciones humanas, y en esta época digital no está de mas, las distancias no ayudan, tenemos siempre cosas que hacer y el tiempo nunca es suficiente, y por si fuera poco cada vez dormimos menos por estar al pendiente de nuestro teléfono. Es importante desconectarnos antes de irnos a dormir, eso significa apagar el teléfono, pareciera mentira pero al no hacer eso nos vemos afectados por el insomnio, acumulación de toxinas en el cerebro y pérdida de memoria. Si no dormimos en el día por andar corriendo por ende no rendiremos en el trabajo, lugar donde estamos por lo menos de 8 a 10 horas diarias.
Un dato sorprendente respaldado por Trends In Consumer Mobility Report de Bank Of America, afirma que el 71% de los usuarios de móvil duermen con el dispositivo a menos de un metro de distancia.
“La única diferencia entre la adicción digital y otras adicciones es que este es un comportamiento socialmente aceptado”, Colier.
Colier, quien tiene un libro que contiene un programa de desintoxicación digital de 30 días nos comparte tres pasos para detener nuestra dependencia digital:
- Comienza por reconocer cuánto uso de dispositivos digitales en verdad es necesario, digamos, para trabajar o navegar o hacerles saber a tus familiares que estás bien, y qué es simplemente una costumbre de responder, publicar y distraerte.
- Haz pequeños cambios. Abstente de usar tu dispositivo mientras comes o pasas tiempo con amigos, y agrega una cosa al día que se haga sin el celular.
- Hazte muy consciente de lo que es importante para ti, lo que de verdad te nutre, y dedícale más tiempo y atención.
Psiquiatras como Takashi Sumioka, han generado programas de desintoxicación atendiendo a las investigaciones gubernamentales que hacen referencia de que sólo en el 2013 el 60% de los estudiantes de la secundaria de Japón empiezan su contacto con el mundo digital desde pequeños y por ello muestran evidencias de adicción. Son las futuras generaciones las que se verán más afectadas con todo este boom tecnológico.
¿Sabías que la adicción a la tecnología es estudiada e interpretada desde hace mucho tiempo? Aunque no está considerada como una enfermedad, los síntomas de las personas que utilizan en demasía sus artefactos tecnológicos son muy similares a aquellos que dependen de algún tipo de droga, según lo consideran analistas como Marc Masio, psicólogo y creador del Programa Desconect@.
Y aunque parece increíble existen algunas apps que nos pueden ayudar a saber el nivel de adicción que tenemos hacia nuestro celular, es necesario y urgente desintoxicarnos ya que nos estamos perdiendo lo que la vida nos pone enfrente.
- Checky. Es una app muy sencilla que cuenta las veces que desbloqueas el dispositivo a lo largo del día. El contador se reinicia cada día a las doce de la noche y el dato del día anterior pasa a engrosar tus datos de uso estadísticos.
- QualityTime. Combina herramientas de diagnóstico y tratamiento de la adicción al móvil. No se limita a contar las veces que desbloqueas el dispositivo como hace Checky, sino que ofrece datos de uso desglosado por apps.
- Forest. Es una app de administración del tiempo que se basa en la técnica Pomodoro . Parte de la premisa de que podemos aumentar nuestra productividad centrándonos en una única tarea durante 25 minutos seguidos y posponer las distracciones a los 5 minutos de descanso que tendremos inmediatamente después.
- Pause. Te permite competir con tus amigos y familiares para ver quién es capaz de aguantar más tiempo con el móvil en modo avión. Algo así como el juego de mirarse a los ojos, pero para nomófobos anónimos. Tan solo debes seleccionar qué actividad vas a realizar durante tu tiempo de desconexión, cuanto tiempo te va a llevar y, opcionalmente, añadir una nota o fotos del evento.
- IF by IFTTT. Es una app de automatización de tareas en tu dispositivo móvil que se basa en una lógica de causa-consecuencia. Es decir: si + ocurre esto + entonces + haz esto otro (If This Then That).
Los smartphones no son malos, lo malo es no ponerle límites a nuestra vida digital, es difícil en estos tiempos desconectarnos, pero como diría Colier, “Sin espacios abiertos ni tiempo libre, el sistema nervioso jamás se apaga, está en un estado constante de alerta y respuesta. Todo el tiempo estamos conectados y cansados. Incluso las computadoras se reinician, pero nosotros no lo estamos haciendo”.