Desde la consultoría, marcamos las catástrofes históricas que está enfrentando el mundo como un boom de innovación, como el motivo perfecto para repensar la forma en la que vivimos, lo que consumimos y producimos.
Ser sostenibles no es un término de moda, es una nueva corriente de pensamiento en la que los públicos ponen al planeta como protagonista y compran bajo dos criterios claves: un propósito que beneficie a su entorno y un discurso con el que se sientan conectados e identificados.
Las palabras diversidad, sostenibilidad y metaverso siguen siendo las más sonadas en lo que va del 2022. Las encuentro en múltiples artículos, blogs y congresos online de los cuales obtengo la información más actualizada sobre tendencias de moda y de consumo para predecir el comportamiento de los usuarios, al menos, durante el primer semestre de este año.
Después de analizar, investigar y dialogar con nuestro equipo de expertos en el DTS lab, llegamos a la conclusión de que la próxima generación de experiencias digitales dependerá de la “simbiosis de relación” entre:
- La diversidad (lo que me beneficia a mí como persona)
- La sostenibilidad (lo que beneficia a mi entorno)
- El metaverso (cómo mi persona interactúa en este entorno)
Una simbiosis es un apoyo mutuo que se establece entre varios actores o entidades, especialmente cuando trabajan o realizan algo en común. Las tres palabras en cuestión representan un hito importante en las formas de interacción humana: la diversidad las moldeó, la sostenibilidad las está marcando, y el metaverso las transformará.
La diversidad como hito del pasado
Mi definición de diversidad es “la multiplicidad de formas en las que se expresan las culturas de los grupos y sociedades”. Existen varios tipos de diversidad, pero la que nos beneficia como personas es la diversidad cultural, ya que nos permite incluir y aceptar todas las costumbres y valores que como seres humanos hemos profesado a lo largo de nuestra evolución.
Según la UNESCO, la diversidad cultural se manifiesta no sólo a través de las diversas formas en las que se expresa el patrimonio cultural de la humanidad, enriquecido y transmitido gracias a una variedad de expresiones culturales, sino también a través de los distintos modos de creación artística, producción, distribución, difusión y disfrute, cualquiera que sea el medio y la tecnología utilizados.
Es lo que te anima a participar activamente en la estructura, procesos y composición de casi todos los grupos sociales en los que interactúas, donde además puedes enriquecerte de ideas y habilidades distintas a las tuyas.
Con lo anterior entendemos que el componente diverso es una característica permanente en nuestra persona que nos permite adquirir nuevos enfoques, crecer y expandir nuestro campo de percepción.
La sostenibilidad como hito del presente
Por sostenibilidad, me refiero a la capacidad de satisfacer las necesidades de la generación actual mediante el consumo de los recursos naturales sin comprometer la disponibilidad de estos para futuras generaciones.
Desde la consultoría, marcamos las catástrofes históricas que está enfrentando el mundo como un boom de innovación, como el motivo perfecto para repensar la forma en la que vivimos, lo que consumimos y producimos.
Ser sostenibles no es un término de moda, es una nueva corriente de pensamiento en la que los públicos ponen al planeta como protagonista y compran bajo dos criterios claves: un propósito que beneficie a su entorno y un discurso con el que se sientan conectados e identificados.
¿Cómo se logra mantener esta ideología? Capacitando, educando, informando y lo más importante, aprendiendo a respetar el lugar que tenemos para vivir y a exigir soluciones sostenibles a las empresas de producción masiva.
Con lo anterior entendemos que el componente sostenible es una oportunidad que hará a las economías más competitivas y a los individuos más responsables de lo que compran hoy para consumir mañana. El metaverso como hito del futuro.
Estoy segura que he escrito más de una vez que el metaverso transformará la forma en que nos conectamos. Los espacios tridimensionales como alternativas de interacción serán cada vez más comunes en la próxima década, donde se estima que habrá más de mil millones de personas dentro de ellos.
Para ese entonces, necesitarás un avatar que te represente virtualmente y refleje tu personalidad en este entorno que combinará lo antiguo y lo nuevo, lo natural con lo digital. Podrás personalizarlo de forma hiperrealista en 3D, al punto de alterar, filtrar y manipular tu identidad digital con distintas formas de cuerpo, rostro, pelo, ropa, gestos y expresiones faciales, por mencionar algunas.
Sin embargo, detrás de esta explosión de creatividad, yacen aspectos tecnológicos y psicosociales que deberán ir de la mano para enseñarnos la capacidad de poder vernos a nosotros mismos en el mundo virtual. Ante este desafío, creamos ConectuMetaverse donde acompañamos a nuestros clientes en este proceso. Puedes enviarme un mensaje privado para separar tu prueba, ¡te queremos ver avatar! Con lo anterior entendemos que el componente metaverso será la plataforma donde la personalización sirva como forma principal de comunicación futura entre creadores y usuarios.
El resultado es la inclusión
A través de estudiar los hitos, obtenemos que el producto final de la simbiosis de relación es la inclusión, uno de los objetivos principales del metaverso, y promete ser una guía de construcción de experiencias digitales para un futuro más diverso y más sostenible.
La inclusión es el reconocimiento de que todas las personas tienen habilidades y potencialidades propias (factor diverso), busca que se fomente y garantice que toda persona sea “parte de” y que no permanezca “separada de” (factor sostenible) y exhorta a los sistemas establecidos a proveer acceso y participación recíproca entre el entorno y los individuos (factor metaverso).
Ser una empresa incluyente y diversa es aquella capaz de moldearse a las culturas emergentes y reflejarle su compromiso a la sociedad. Ser una empresa incluyente y sostenible es aquella capaz de promover un ciclo de consumo responsable y positivo entre clientes y proveedores. Ser una empresa incluyente en el metaverso es aquella capaz de transformarse en entornos virtuales, ofreciendo más y mejores posibilidades inmersivas y asequibles a los usuarios.
Se sabe que Meta es la primera empresa que está trabajando en la DEI para el metaverso (Diversidad, Equidad e Inclusión) por medio de cinco pilares fundamentales que pueden servirnos para entender mejor su alcance:
- Hacer las preguntas correctas. Se están cuestionando las barreras históricas de las tecnologías de información y cómo eliminarlas.
- Construir redes de talento diverso. Están sumando personas que trabajen en la industria de la tecnología, específicamente en áreas como la inteligencia artificial (IA), la realidad virtual (VR) y la realidad aumentada (AR).
- Romper las barreras del idioma. Están buscando incorporar nuevas herramientas de traducción para que tanto creadores como consumidores puedan participar por igual en el metaverso.
- Ampliar el acceso al metaverso para usuarios y creadores. Las personas podrán participar utilizando cualquier dispositivo, incluidos los smartphones; mientras siguen trabajando en volver accesibles los auriculares VR para los que quieran la experiencia.
- Crear innumerables opciones para la autoexpresión. Buscarán incorporar mejoras en los avatares, desde nuevas formas faciales hasta dispositivos de asistencia (implantes cocleares, sillas de ruedas, etc.).
Ejemplos reales que reflejan la diversidad convertida en experiencia
Las potencias asiáticas son las más interesadas en incursionar dentro de este sector, y podemos poner a prueba la simbiosis ya aprendida, al igual que los cinco pilares que usa Meta para dictar los cánones del metaverso actuales y así entender a fondo el plan maestro de cada país:
“XiRang”, el metaverso chino
Desde finales del 2021, el gigante tecnológico de China, Baidu, conocido también como el “Google” chino, comenzó a dar sus primeros pasos hacia la creciente industria del metaverso. Se encuentra preparando su aplicación de realidad virtual llamada “XiRang”, que se traduce como “Tierra de Esperanza”.
Se podrá acceder a esta plataforma a través de un smartphone, computadora o gafas de realidad virtual, cuya versión en modo de prueba puede ser utilizada sólo desde China.
Ahí, sus usuarios pueden participar en exposiciones virtuales o practicar buceo en una piscina digital.
Según Baidu, el metaverso que están desarrollando permitiría que hasta 100,000 usuarios participen en el mismo espacio digital, y se estima que su lanzamiento completo podría demorar hasta 6 años.
El “Nuevo Trato Digital” del metaverso surcoreano
Corea del Sur podría convertirse en un espacio perfecto para el metaverso, ya que posee una de las conexiones a Internet más rápidas en el mundo y una de las sociedades más conectadas del planeta.
Siendo un país líder en tecnología y constante búsqueda de innovaciones, estableció el año pasado una alianza para contribuir al desarrollo de su ciudad metaverso encabezada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de Corea del Sur y 25 compañías e instituciones.
Todo apunta a que convertirán a la capital, Seúl, en la primera ciudad metaverso, con la mayor parte de su plan desarrollado para finales del 2022. Se estima que el Metaverse 120 Center (nombre tentativo) sea inaugurado en 2023 como un servicio público virtual, disponible a través del centro de servicio civil del Ayuntamiento de Seúl. https://sp.yna.co.kr/view/ASP20220120001700883 https://es.cointelegraph.com/news/south-korea-embraces-the-proto-metaverse
Sin importar que el mundo digital cambie rápidamente, debemos tener un conocimiento profundo de las necesidades y sentimientos de nuestros clientes, por lo que pensar bajo la metodología Design Thinking puede ayudarte a redefinir formas de trabajar y resolver problemas de manera efectiva, logrando abordar cada obstáculo como un desafío de diseño.
Deja de lado las viejas suposiciones y simplemente interactúa, escucha y haz preguntas para descubrir problemas centrados en los usuarios.