Ante la abundante cantidad de información que hay en el Internet, uno de los mayores retos a los que se enfrentan actualmente las empresas al promover sus productos o servicios, es captar y mantener la atención de sus clientes.
Por este motivo muchos de los esfuerzos del marketing digital van dirigidos en priorizar dentro de sus estrategias publicitarias el concepto de Economía de la Atención, que considera a la atención humana como un bien escaso y valioso para los anunciantes.
«La atención pasó a ser el botín más preciado«, expresa el economista sueco Umair Haque, director del Havas Media Labs, quien en una columna publicada en Harvard Business Review, sostiene que para trascender las marcas deben proponerse crear valor en las personas, ganarse su respeto y confianza.
También es fundamental que la información sea transmitida de manera oportuna en los diferentes canales de comunicación para aumentar así el porcentaje de éxito en la promoción de la empresa.
“El público tiene ante sí una fuente ilimitada de información, y un tiempo limitado. Por eso suele tomar decisiones cada vez más rápidas y volátiles”, comenta Juan Quaglia, consultor en marketing online, certificado en Google AdWords y Google Analytics.
Con base a este planteamiento se puede afirmar que sólo las campañas publicitarias que sean astutamente planificadas y ejecutadas son las que podrán destacar entre las de la competencia, al lograr estimular al consumidor con un contenido inteligente.
Contenido creativo en redes
El Instituto de Marketing Online de Catalunya recomienda a las empresas los siguientes puntos para captar la atención de los consumidores en las redes sociales:
- Se natural. El 79% de los consumidores está dispuesto a ver vídeos de marcas siempre que sean naturales y no directamente publicitarios -según el Yahoo Native Video Case Study 2014-. Pero es más, el 55% de ese 79% volverá a ver el contenido otra vez, y el 51% de ellos lo compartirá.
- Se creativo. Cuando el marketing es creativo es doblemente efectivo.
- Se personal. Cuenta alguna historia personal que logre crear un diálogo con el que recibe el contenido, que por lo interesante del mismo desee compartirlo con otros.
- Crea confianza. Si en tus mensajes dices una cosa y luego haces otra, se te penalizará con críticas y por supuesto no les interesará comprar nada de tu marca.
- Escucha. Pregunta directamente a través de las redes y veras que obtendrás respuestas. Aprovecha eso y crea engagement en social media gracias a vídeos donde se les involucre y se les pida opinión.
- Enseña. Aprovecha tus vídeos y enséña a hacer cosas con tus productos, por ejemplo. Si a ellos les interesa, lo compartirán y podrás llegar a muchos otros consumidores, formarán parte de tu estrategia de distribución de contenido.
- Crea intriga. somos curiosos por naturaleza, y en Internet nos ocurre lo mismo. Todo lo que nos genere interés y nos deje con ganas de más, será viral o, al menos, conseguirá cumplir los objetivos de la marca. Es decir, enganchar al público y generar más interés y, por consiguiente, aumente el negocio.
- Emoción. Qué es la vida sin emoción; nada. Lo mismo ocurre con el contenido. Si es aburrido y carece de emoción, no generará interés y mucho menos engagement.
El cliente es un ser humano disperso e inmerso en un mundo de información, si lo que se busca en las empresas es llamar su atención, necesitamos campañas publicitarias más originales y sensoriales, que logren transmitir su contenido en el momento adecuado por los canales de comunicación más efectivos.